A principios de 1990 la desaparecida compañía Astilleros Españoles, hoy Navantia, decide acometer el proyecto de restauración del Antiguo Dique de Carenas de la Factoría de Matagorda y su entorno más próximo. Dos grandes líneas de trabajo marcaron las tareas de rehabilitación, por un lado las intervenciones sobre los bienes inmuebles del antiguo centro de reparaciones y por otro las operaciones de recuperación del patrimonio documental de la empresa. Todos los esfuerzos realizados se materializaron en la creación de un Museo del Astillero, meta que supuso la puesta en marcha de un foco de interés cultural capaz de atraer a todo tipo de personas interesadas en el pasado y presente de nuestra industria naval. Edificado sobre el antiguo edificio de la cámara de bombas, en sus cuatro salas y espacios anexos se puede seguir con todo detalle la evolución de la construcción naval española, personificada en el astillero de Matagorda, en sus instalaciones y en su producción. El edifico del Museo se completa con las instalaciones de Archivo, Biblioteca, Hemeroteca y Fototeca, donde pueden consultarse los aproximadamente , 4.000 legajos, 3.500 libros, 200 cabeceras de revistas y 500.000 negativos fotográficos que se custodian en estos servicios.