Para este segundo día el compañero Juan José Peralta García es el encargado de moderar una mesa compuesta por:
Juan Carlos Muñoz Villareal, director del IES Virgen del Carmen
José Osuna García, director del IES Manuel de Falla
David López Treviño, director de Tecnofor Sur
Como introducción, Juan José, hizo un ejercicio de memoria recordando lo que significaron para la formación de trabajadores los centros de Virgen del Carmen (Las Canteras), Safa o San Severiano, aportando trabajadores cualificados para los centros de Matagorda, Astilleros de Cádiz o Bazán.
Hoy la situación ha cambiado y no se le da el valor pertinente a los ciclos formativos, buscándose una salida en forma de cursos de un par de meses, donde no se llega a formar a un joven como profesional ni mucho menos como persona.
A continuación Juan Carlos Muñoz Villareal hace una exposición de la e
ducación en los ciclos formativos basándose en cuatro “patas”:
-Los estudios como base.
-La necesidad de que el personal docente esté al día de las últimas tecnologías.
-Tener la posibilidad de conseguir esa tecnología para los centros.
-Conseguir el respaldo de las empresas.
Debe existir una previsión, a dos años vista, para formar los profesionales que las distintas empresas demanden. Esta formación será de dos años y estará cumplimentada con las prácticas en las empresas.
Es necesario buscar una diversificación en los oficios y no caer en la dependencia de una sola empresa. La crisis de los Astilleros es buena muestra de ello.
Se mostró en contra de los cursillos que se dan para los jóvenes de tres meses como salida a su futuro profesional e hizo hincapié en el daño que está haciendo para la formación el intrusismo profesional.
Nos informó del alto porcentaje de alumnos que, cuando acaban el ciclo formativo, tienen ofertas de empresas.
El problema es que no hay alumnos. Faltan jóvenes que quieran estudiar y terminar su ciclo formativo.
José Osuna García se mostró de acuerdo con lo expuesto por Juan Carlos y quiso compartir con nosotros esa visión que se tenía en sus años de estudiante cuando había el mal estudiante, que no terminaría ningún estudio, el torpe, que se marchaba para Formación Profesional y el listo que hacía el Bachillerato.
Visión equivocada entonces que, por desgracia, se está repitiendo ahora, incluso por las familias de los escolares, parte esencial en la formación.
También señala como negativo la falta de planificación en los ciclos formativos desde el Ministerio.
Ve como grave la gestión de los fondos europeos para la formación. Si en Euskadi se encarga de su gestión la Consejería de Educación y en Cataluña parte de esos fondos también los gestiona la Consejería, aquí, en Andalucía, los fondos los gestionan los sindicatos mayoritarios. La diferencia es evidente.
Remarca la necesidad de que le profesorado siga formándose y que los beneficios de las empresas deben revertir en la formación.
Formación como personas, con una base cultural, con su tiempo y no encauzarla a un cursillo de tres meses, que le hacen flaco favor a la formación del individuo, pues éste ve una salida “fácil” a su situación y abandona los estudios. Después la realidad es otra cosa.
David López Treviño, como representante de una empresa de formación nos entregó un decálogo de cual es la formación en el ámbito laboral compuesto por los siguientes puntos:
-Específica y práctica
-Continua
-Adecuada al colectivo
-Transversal
-Planificada
-Integral
-Con formadores adecuados
-Reconocida
-Abierta a las nuevas necesidades empresariales e individuales
-Conectada con el mundo extralaboral
Así, David, fue desgranando punto por punto para terminar con algunas reflexiones, entre las que destacamos “¿Dónde están los representantes de los trabajadores en los momentos de la formación?”
Después se abrió un turno de preguntas por parte del público asistente.
Al final del acto se hizo entrega a cada participante de un placa conmemorativa, así como al artista puertorrealeño Manuel Losada Aguilar.
Así se echó el telón a las IV Jornadas Conmemorativas del 1º de Mayo.
